viernes, 15 de noviembre de 2013

El derbi, tabú en el vestuario de la UD Las Palmas. Miguel Ángel Ramírez


Imagen de un entrenamiento.

Tras el inesperado tropiezo en el Rico Pérez el pasado fin de semana, la plantilla de Las Palmas se aísla para no contagiarse del pesimismo de agoreros y evitar también el ruido que empieza a generar el enfrentamiento de máxima rivalidad contra el Tenerife del 4 de diciembre.


  
En el seno del equipo, también en las entrañas de Pío XII, se califican de «trampa» los dos próximos enfrentamientos, contra el Mirandés y el Barcelona B, rivales de la zona media y baja de la clasificación sin grandes aspiraciones. La derrota ante el Hércules, hundido en la tabla, ha generado cierta desconfianza en un calendario que, a priori, parece asequible hasta el final de año, horizonte al que se pretende llegar situados entre los primeros.


Por esto, y con el ejemplarizante tropiezo del Rico Pérez y otras decepciones ante oponentes aparentemente inofensivos como el Eibar (1-1), Alavés (1-1) o Sabadell (0-0), la plantilla se conjura para no fallar en los próximos enfrentamientos, evitando el ruido que comienza a generar el derbi de la primera semana de diciembre en el Heliodoro Rodríguez López.


«¿El Tenerife? Es un partido importante, pero nada nos debe despistar ahora. Queda mucho para disputar ese encuentro, y tenemos ejemplos cercanos de lo que nos puede pasar si no nos centramos en el próximo rival. El del Mirandés es un partido trampa,  un rival muy peligroso y no podemos fallar en casa, más tras la última derrota», dicen desde el vestuario que lidera Sergio Lobera. El entrenador no quiere más distracciones, a pesar del valor que, para la afición, tiene la visita a Tenerife.


También desde el club se ven con recelo los preparativos de ese compromiso, fijado por la LFP el próximo 4 de diciembre a las 20.00 horas, confiando en que el equipo enmiende hasta esa fecha la derrota ante el Hércules y se sitúe a comienzos de 2013 cerca o en las primeras dos plazas.


¿De negro? Sin embargo, a pesar de los esfuerzos de los protagonistas por obviar el clásico, el partido comienza a generar noticias. Como la que puede obligar a Las Palmas a jugar de negro, su tercera equipación, en el Heliodoro por la coincidencia del azul en el calzón principal y el blanco de la segunda camiseta. El club alega que, tras la disputa del Tenerife-Lugo, ambos con el pantalón azul, puede jugar el derbi con la primera indumentaria. Por otro lado, el Tenerife, que hará pagar 5 o 10 euros a sus abonados, cederá 800 entradas a la UD.

fuente: canarias7.es

2 comentarios: